Ustedes las esposas, respeten a sus esposos, como conviene en el Señor.
Ustedes los esposos, amen a sus esposas, y no las traten con dureza.
Ustedes los hijos, obedezcan a sus padres en todo, porque esto agrada al Señor.
Ustedes los padres, no exasperen a sus hijos, para que no se desalienten.